No existe una norma escrita estándar que determine que es lo primero que debe crear el ilustrador cuando se enfrenta a una obra libre. En los libros, webs y blogs dedicados a esta fase se le otorga libertad de elección al creador, por tanto podríamos decidir que el orden de los factores en este caso no alteraría el producto y es el proceso mental y natural del creador el que sentencia el orden.
Hay casos en los que el ilustrador primero crea la personalidad de un personaje y a partir de ese punto en forma de espiral va desarrollando todo un universo; y hay otros que sin embargo empiezan con una historia y un contexto y a partir de ahí desarrollan los personajes para esa historia.
CREAR PERSONAJES
Cuando se trata de crear un personaje, lo primero que se crea es el propio personaje, con una primera parte muy literaria a la que se le otorga una definición de edad, físico, carácter, estilo, entorno donde vive, función, determinación de persona, animal u objeto animado… una vez están definidos sus parámetros de forma literaria, es cuando el ilustrador se enfrenta a él y le da forma creativa dibujada otorgándole una anatomía con unos rasgos acordes a las sensaciones que se quieran crear; para después sumarle gestos y expresiones.
En este punto, es importante tener en cuenta todo lo que rodea al lenguaje no verbal y ser consciente de los parámetros y estereotipos físicos y de actitudes establecidos en función del carácter de las personas a pesar de que la ilustradora Araceli Costales explicaba que hay ilustradores que olvidan todos estos parámetros y se sirven simplemente de la intuición, un sentido que los ilustradores tienen muy desarrolladas pues “observan el mundo con una potencialidad de dibujo”. Tras ello se crea el vestuario, los accesorios y los complementos y a partir de este punto se narran las acciones.
Alumna de la escuela Visions creando un personaje. Fuente: Irene Díaz
CREAR DECORADOS
Si nos referimos a la creación de decorados, el proceso es el mismo. Primero se realiza una descripción del espacio que si es un encargo ya te viene dada y si es algo propio tú mismo debes generar. Es muy importante en ese punto la documentación en el que ilustrador debe buscar y observar cuentos, fotografías de interiorismo, libros, revistas y a partir de esa observación el ilustrador debe extraer aquellos elementos y rasgos que mejor se ajusten al encargo o a tu ideal y se realiza un primer boceto. En caso de ser un encargo, el cliente debe avalar ese boceto e indicar los cambios que desee.
CREAR OBJETOS
Y por lo que respecta a los objetos se repetiría la misma dinámica creadora que en los casos anteriores con una primera fase literario-descriptiva y una segunda fase creativa.
Irene Díaz